Fernando Alonso ha insistido en que está totalmente motivado en el deporte de motor. El piloto español ha comentado que uno de los objetivos en su trayectoria profesional sería añadir a sus dos mundiales de F1 victorias en la emblemática carrera de Le Mans y en las 500 millas de Indianápolis. "Sí, hay tres competiciones en lo más alto de la leyenda del deporte de motor: Mónaco, Le Mans y las 500 millas de Indianápolis. Sé que es complicado ganar las tres, pero sería un gran reto", explica Alonso en AS.
No obstante, el de McLaren ha dejado bien claro que no ha terminado su papel en la F1 todavía, a pesar de que Johnny Herbert, expiloto de la categoría, recientemente identificara una aparente falta de motivación del español. "No sé cómo narices pueden decir que no estoy motivado".
"En 2012 peleé por el Mundial hasta el último momento. En 2013 acabé segundo; en 2014 sumé tres veces más puntos que alguien como Kimi Räikkönen, y en 2015 estuve empujando el coche en Hungría para llegar al pitlane. Ahora tengo un neumotórax, dos costillas rotas y estuve pidiendo a la FIA que me dejara pilotar el coche. Es absurdo decir que no estoy motivado. Puedes decir lo que quieras de mí: que soy lento o que soy viejo o feo, pero no que no estoy motivado", aclara Alonso.
Sin embargo, cuando se le comentó que la mujer de Herbert se quedó algo preocupada por el desplante que Alonso le dio a Herbert en Baréin, el de McLaren respondió: "Bueno, mi madre estuvo preocupada durante semanas por mí. Preocupada sobre el accidente en Australia, por si volaba a Baréin, por si quería competir...y luego este tipo dice que quiero retirarme".