El equipo Sauber, al igual que Renault, termina el Gran Premio de Mónaco don doble abandono. A pesar de que la estrategia estaba funcionando y el ritmo de ambos pilotos no era malo, un mal movimiento echó todo el trabajo del equipo por la borda. Los de Hinwil avisaron a Felipe Nasr por radio que dejara pasar a Marcus Ericsson. El sueco no esperó y decidió tomar el interior de la Rascasse para adelantar, lo que terminó en un toque entre ambos, doble abandono y tres posiciones de sanción para Ericsson en el Gran Premio de Canadá.
Marcus Ericsson (abandono):
"Un final de carrera muy decepcionante. Habíamos tomado algo de riesgo, así que fui el primero en parar y poner neumático de seco. Funcionó, pero no fue ideal, ya que me vi en medio de las banderas azules. Tuve que apartarme de la trazada y dejar pasar a otros pilotos, lo que significó que tuve problemas para aumentar la temperatura de mis neumáticos. Cuando las gomas empezaron a funcionar di caza a Felipe, pero me quedé detrás de él. Me dijeron que habían hablado con Felipe por radio; entonces vi un hueco e intenté adelantarle, pero todos vimos lo que pasó. Es una situación difícil para nosotros, y en estos momentos es aún más importante permanecer juntos como equipo. Pido disculpas, y estoy seguro de que no volverá a suceder".
Felipe Nasr (abandono):
"Es una lástima que ninguno de los dos haya terminado la carrera. Es la peor situación que podría sucedernos como equipo. Marcus y yo estábamos en estrategias diferentes, por lo que su segunda parada fue más pronto que la mía. Mis neumáticos empezaron a conseguir temperatura y estaba dando caza a los coches de delante. Para mí no era el momento adecuado para intercambiar posiciones. De repente, en la Rascasse, sentí que alguien chocaba por detrás de mí. Sin duda, es muy decepcionante para todos, ya que el equipo entero trabaja muy duro. Pido disculpas por lo ocurrido y nos aseguraremos de que esto no vuelva a pasar".
Monisha Kaltenborn, jefa del equipo Sauber:
"Ha sido un comportamiento inaceptable de ambos pilotos, y el trabajo de todo el equipo ha terminado con un accidente. Marcus y Felipe saben lo mucho que trabajamos en cada fin de semana y ellos tienen la responsabilidad de acabar la carrera. Después de evaluar la situación general era importante dejar pasar al coche más rápido delante, para así poder aprovechar nuestras oportunidades. La decisión se basó en los datos de ambos coches. Después de eso, hemos aclarado lo ocurrido entre nosotros y los dos pilotos son conscientes de sus responsabilidades".