Carlos Sainz ha indicado que los nuevos monoplazas del año que viene son exactamente lo que la F1 necesita, ya que harán que el Mundial parezca otra categoría. Y es que los coches de la próxima temporada utilizarán neumáticos más anchos, contarán con una aerodinámica revisada y los neumáticos traseros serán más grandes que los delanteros. Todo ello forma parte de la nueva regulación que entrará en vigor en 2017. Jenson Button, de McLaren, ya ha dicho que los coches de 2017 van a ser increíbles y volverán a asustar a los pilotos.
Por su lado, Sainz ha podido observar un poco cómo será el chasis de Toro Rosso para el año que viene y se ha mostrado emocionado al respecto. "Lo he visto en el túnel de viento y he de decir que la F1 parece que vaya a ser otra categoría diferente a la de este año. Es lo que la F1 necesita. Le llamamos F1 híbrida; es híbirda, no es F1 al completo, pero el coche del año que viene se parece a un coche real de F1", apunta el español en declaraciones que recoge Autosport.
Por otro lado, Daniel Ricciardo, piloto de Red Bull, cree que los coches más rápidos conseguirán que la sesión de clasificación sea mejor en 2017, pero no está del todo seguro que vayan a mejorar las carreras: "Si los coches son más rápidos, genial. Quizá menos en carrera, pero en clasificación, si podemos ir a toda velocidad en la curva 3 en Barcelona y casi igual de rápido en la curva 9, por ejemplo, sería genial".
"Simplemente el hecho de poner algo más de nosotros mismo en la vuelta de clasificación lo hará más divertido. Si, al final, la carrera se convierte más o menos en lo que tenemos este año no creo que sea tan trágico y creo que está bien. Estoy seguro de que seguiremos teniendo que gestionar los neumáticos y hacer todo eso, no creo que ese aspecto cambie pronto. Nos hemos acostumbrado a ello y, en cierta manera, es divertido gestionarlos y, a veces, crea estrategias de dos paradas o incluso tres", añade el de Red Bull.