Lewis Hamilton, piloto titular del equipo Mercedes AMG F1 Team, ha logrado la pole position en el Gran Premio de Brasil de 2016 frente a un Nico Rosberg que se fue creciendo a medida que pasaban las rondas de la sesión de clasificación. Así, el vigente Campeón del Mundo de F1 se aseguró la primera posición gracias a una mejor vuelta de 1:10.736, que resultó ser 1 décima más rápida que la que le valió a Nico Rosberg para asegurarse la segunda posición en parrilla.
Los Red Bull y Ferrari no fueron rival para las flechas plateadas, siendo ambos mucho más lentos que los vigentes Campeones del Mundo. De este modo, Kimi Räikkönen, piloto titular del equipo Ferrari, acabó la sesión de clasificación 3º a casi 7 décimas del 'poleman'. Max Verstappen, Sebastian Vettel y Daniel Ricciardo se barajaron por este orden las posiciones que van desde la 4ª a la 6ª.
Romain Grosjean, piloto titular de Haas, destacó en Q3 al ser "el mejor del resto" al clasificar en séptima posición con un excelente tiempo de 1:11.937. Nico Hülkenberg, Sergio Pérez y Fernando Alonso completaron por este orden el 'top-10'.
Los Williams no pasan de la Q2
La tremenda igualdad que existe en la zona media de la parrilla propició algo que no veíamos desde hace muchos Grandes Premios: ver eliminados a los dos Williams en la segunda ronda de la clasificación. Así, el equipo de Grove no cosechó el resultado que todos habrían esperado después de verles muy competitivos en las dos sesiones de entrenamientos libres del viernes.
Los Toro Rosso tampoco destacaron demasiado, algo extraño después de haberles visto brillar en las clasificaciones de los últimos Grandes Premios. Daniil Kvyat y Carlos Sainz tan solo pudieron ser 14º y 15º respectivamente.
Jenson Button cae en la Q1
La Q1 vio caer a un frustrado Jenson Button por el complicado balance de su MP4-31. El Campeón del Mundo de 2009 se quedó a las puertas de pasar a la Q2 al asegurarse la 17ª posición en un fin de semana en el que se han vivido multitud de problemas en ambos lados del garaje de McLaren Honda.
El equipo Manor Racing se impuso con ambos monoplazas a los coches de Sauber F1 Team, algo muy importante para dos equipos que se encuentran inmersos en una intensa lucha por eludir el último puesto del Campeonato de Constructores.