Carlos Sainz, piloto titular del equipo Scuderia Toro Rosso, se está enfrentando a un complicado fin de semana en el Gran Premio de Abu Dabi 2016. Desde que se produjese el pinchazo de Daniil Kvyat en la primera sesión de entrenamientos libres, el rodaje de los Toro Rosso ha sido mínimo por motivos de seguridad al estar ya bajo la atenta mirada de la FIA por un problema que ya es endémico en el STR11.
"Está claro que vamos a ir a ciegas de cara a la clasificación y la carrera. Creo que hemos dado 15 o 20 vueltas en total en el in de semana. Partimos con una desventaja muy grande con respecto a nuestros rivales directos como Haas, Renault o McLaren pero bueno, es la última, hay que salir a divertirse a intentar mejorar todo lo posible lo que vamos haciendo y aprender de estas 20 vueltas que hemos podido dar", comentó el madrileño en declaraciones a Movistar TV.
Así, no está del todo claro que los Toro Rosso estén en condiciones de afrontar la clasificación y carrera con garantías, pues la FIA se mostrará contundente si se repiten los pinchazos repentinos en los monoplazas del equipo de Faenza: "La FIA vela por la seguridad de pilotos y equipos, así que siempre va a tomar la decisión más cuidadosa pero no nos queda otra que tratar de mejorar el problema y hacer nuestra carrera".