Renault tuvo dividida la suerte este viernes. Nico Hülkenberg valoró positivamente el primer día, pero piensa que su RS17 falta para estar a punto. El alemán no tuvo averías en su monoplaza, por lo que pudo rodar 56 vueltas en total. Mientras que Jolyon Palmer sufrió en ambas sesiones: en los primeros entrenamientos le falló el MGU-K y en los segundos fue el embrague. A pesar de los contratiempos, el británico estuvo cómodo con su coche en el Gran Premio de casa.
Nico Hülkenberg (17º y 7º):
"Tuvimos dos sesiones buenas, sin grandes problemas. El trabajo consistió en rodar con el nuevo suelo esta tarde. Ahora, necesitamos analizar y ver cómo ha funcionado. Respecto al ritmo, hay que trabajar en el equilibrio y en el rendimiento, especialmente en las tandas largas. Eso significa más preparación entre ahora y la clasificación de mañana".
Jolyon Palmer (18º y 18º):
"Me perdí mitad de la mañana por un conducto en el MGU-K y lo tuvimos que reemplazar. Al final, conseguí rodar y estuve contento con el coche. La tarde comenzó bien, estaba satisfecho con los blandos. Pero cuando puse los superblandos, no tenía agarre; hice un trompo y tuve problemas para que funcionaran correctamente. Desafortunadamente, después tuvimos que parar el coche por un problema en el embrague. Espero que mañana tengamos mejor suerte".
Bob Bell, director técnico:
"Nico rodó y conseguimos la información que necesitábamos con los neumáticos para carrera. Marcó un buen tiempo con poco combustible, esperamos que se repita en clasificación. Estamos encantados con el progreso que hicimos. Jolyon tuvo menos fortuna debido a un problema mecánico por la mañana y en el embrague por la tarde. En general, pienso que tuvimos un día productivo".