Sergio Perez es el piloto que más se ha acercado este año a los tres equipos que imperan la disciplina de la Formula 1. Su séptima posición le coloca a las puertas del gran trípode Mercedes-Ferrari-Red Bull, con una consistencia y una fiabilidad envidiables, no hay un piloto que lo supere en mitad de la tabla. Aun siendo incapaz de finalizar en el podio en todo el año, 2017 ha sido uno de los años más buenos de Pérez, con 17 de 20 carreas puntuadas. Su manejo en la gestión de neumáticos ha sido una de las claves en un año de cambios, que no ha supuesto para él tan gran desbarajuste como para otros equipos, manteniéndose como piloto principal inamovible en la alineación de Force India. Tras la llegada de Esteban Ocon, no obstante, hemos visto a un Sergio Pérez dubitativo y algo desequilibrado. La pareja ha conseguido hacer de su equipo el 'best of the rest', aunque el análisis introspectivo no deja del todo contento a Pérez.
De cara al inicio de la nueva temporada, el piloto mejicano ha tenido la oportunidad de comentar cómo ve la situación del equipo, una vez sabida la noticia de que desde la directiva se espera una temporada de competitividad sin ataduras, abandonadas las órdenes de no luchar entre compañeros. Sergio Pérez ha declarado que, por su parte, ve una posición aventajada frente a la de su compañero de equipo, Esteban Ocon, que vivirá su segundo año en Force India, con lo que Pérez augura un aumento de presión sustancial que influirá en el pilotaje del francés, y por tanto, en la rivalidad de los coches rosados.
"Creo que la presión recaerá sobre todo en él porque es su segundo año, y todos esperarán mejoras en comparación, querrán verse cosas grandes", explicaba Pérez. Ha habido algún que otro rumor sobre contactos entre el piloto francés y Mercedes, sobretodo en los momentos en los que el desencuentro entre los compañeros ha sido mayor, por lo que algunos esperan que una buena temporada de Ocon suponga su elección para correr con las flechas plateadas en 2019. Toto Wolff ha negado en todo momento estos rumores, sin embargo, asegurando que la primera y única opción es y será Valtteri Bottas, por mucho más tiempo.
Esteban Ocon se hizo con el puesto en Force India para sustituir a Nico Hulkenberg en el inicio de 2017, cuando el alemán fichó por Renault teniendo experiencia de tan solo haber corrido con Manor en 2016, año en que no consiguió un solo punto. Sus primeras actuaciones le procuraron la permanencia en la alineación, con tres puntuaciones seguidas, y una considerable mejora de posición en sus cinco primeras carreras. Solamente en dos ocasiones ha finalizado sin puntuar este piloto en su primer año completo como piloto de Formula 1, consiguiendo terminar tan solo 13 puntos por detrás de Pérez. "En su momento tuve en una alta consideración a Nico, cosa que mantengo hoy en día, y ciertamente también valoro mucho a Esteban. Creo que tiene mucho talento, ha llegado al equipo muy bien preparado. No hay duda alguna de que es un gran piloto, y uno de los futuros pilotos más grandes, durante todo el año fue todo un reto correr junto a él", aseguraba el mejicano.
Un incómodo final de temporada
Efectivamente, el fuerte rendimiento del joven piloto francés de 21 años propició el aumento de la rivalidad con su compañero de equipo, de 27, llegando a amargas situaciones que dieron lugar a las órdenes que desde la directiva les prohibían luchar en carrera. La pareja vivió momentos de fricción en Canadá, pero los toques entre los monoplazas comenzaron en Azerbaiyán, y Hungría, hasta que, en Spa, Bélgica, la situación fue finiquitada por la directiva, hasta el final de la temporada. "Tuvimos un par de momentos con alguna que otra carrera donde teníamos las órdenes de no podíamos pelear el uno con el otro", concedía Pérez. Además de este hecho, algunos problemas con el coche le impidieron mejorar sus resultados al final de temporada, decía el mejicano, sobre todo en las clasificaciones. Pérez aludía al Gran Premio de Singapur, en septiembre, cuando el equipo consiguió una gran mejora en el equipamiento de su monoplaza, lo que supuso el desbarajuste que el mejicano sufrió y le supuso perder distancia con Ocon.
"Tuvimos algunas mejoras en el coche que me hicieron perder mucho equilibrio. Dejé de sentirme cómodo y esto coincidió con el auge de Esteban en la clasificación. Durante ese período tuve grandes problemas, peor me complace ahora haber sido capaz de arreglar esas carencias y haber llegado a una buena comprensión del coche, y de mis propios fallos", explicaba Pérez. Aún con estos problemas en la espalda, el mejicano está dispuesto a volver a la carga y batir a su compañero de equipo de nuevo en la temporada 2018. "Ese es mi objetivo, definitivamente es mi principal objetivo, pero vamos a estar muy cerca de nuevo, creo yo.
El aprendizaje de este año me da mucha confianza, especialmente mirando al año nuevo, se presenta un buen punto de inicio para mí", aseguraba Sergio Pérez. El piloto mejicano es uno de los mejores de la competición que actualmente no compiten en los grandes equipos, con lo que su nombre podría sonar para cambiar dicha circunstancia. Una de las cuestiones que debería solucionar para que el mercado de pilotos le coloque en un equipo que le asegure el triunfo que tanto espera, es vencer la dura lucha con su compañero. Si quiere aterrizar en uno de los grandes, 2018 es una gran oportunidad para conseguirlo, y batir a Ocon es, como el propio piloto decía, la única prioridad.