El Campeonato 2018 de Fórmula 1 se presenta, a priori, más igualado que nunca. Con Mercedes como principal rival a batir y Ferrari en plena fase de crecimiento, Red Bull podría sumarse (esta vez sí) a la batalla por el título. No suena descabellado, pues la temporada pasada la escudería austriaca logró el triunfo en tres Grandes Premios y alcanzó la tercera posición en la clasificación general, a pesar de los graves problemas de fiabilidad que acarreó durante todo el año.
El piloto de Red Bull, Daniel Ricciardo, se muestra optimista de cara a 2018, aunque prefiere mantener los pies en el suelo e ir progresando a poco a poco. Sin embargo, al ser preguntado por la posibilidad de que logren batallar con Mercedes y Ferrari, e incluso superarles, no duda en admitir que esa opción está encima de la mesa, ya que con trabajo y constancia todo puede ocurrir. Y si no que se lo digan al propio piloto australiano, que con el paso de los años ha logrado convertirse en uno de los pilotos más laureados de la parrilla (recordemos que venció a Vettel durante la temporada que coincidieron en la escudería; y posteriormente ha hecho lo propio con Verstappen).
Con los pies en el suelo
"Siento que hay buen ambiente en el equipo, pero nadie se viene demasiado arriba. Somos conscientes de que tenemos trabajo por hacer si realmente queremos lograr nuestros propósitos. Sabemos que tenemos algunos deseos a por los que ir esta temporada. Creo que incluso podemos luchar con Mercedes y Ferrari, y si me apuras hasta llegar a batirles a largo plazo durante el año", ha admitido en una entrevista realizada en exclusiva para Red Bull. Además, ha explicado que la evolución lograda en 2017 les servirá para continuar creciendo en los próximos meses: "Sin muchos cambios en el reglamento y demás, mejoramos mucho el coche el año pasado, así que supongo que, en principio, deberíamos poder llevarlo a cabo durante este año y seguir evolucionando a partir de ahí. Tendríamos que poder pelear más a menudo. El tiempo lo dirá. Pero estoy seguro".
De igual modo, Ricciardo prefiere mostrarse cauteloso y asegura que no quiere marcarse una meta específica, sino ir creciendo y que los resultados lleguen por sí solos: "Tengo metas que quiero lograr pero no digo necesariamente que tengan que ser en una carrera concreta, o que tenga que subir X veces al podio o sumar tantas poles. No me marco metas así. Creo que lo importante para mí es que quiero ser sincero conmigo mismo y asegurarme de que estoy lo mejor preparado que puedo para cada carrera, y así sé que sacaré el máximo provecho de ello", ha concluido el piloto australiano.