El primer Gran Premio de la temporada ha llegado a su fin, con Sebastian Vettel llevándose la victoria por delante de Lewis Hamilton. El punto clave de esta carrera fue el abandono de Romain Grosjean en la curva 2 tras efectuar su parada en boxes. A partir de este hecho, apareció el Virtual Safety Car y posteriormente el Safety Car, el cual benefició al alemán de Ferrari.
En cuanto al rendimiento de las gomas fue el esperado y la estrategia fue a un solo pit stop. Mario Isola, responsable de Pirelli, destaca el óptico comportamiento de los neumáticos durante toda la sesión ya que no hubo ningún contratiempo al respecto
Mario Isola, responsable de Pirelli:
"En este Gran Premio hubo dos mitades: antes y después del Safety Car. Este ayudó a decidir el desenlace gracias a la inteligente estrategia de Ferrari. Al final, vimos una carrera muy apretada con las cinco primeras posiciones disputadas hasta la última vuelta. La mayoría de pilotos ha optado a una estrategia de una única parada por lo que el periodo de coche de seguridad ha ayudado a minimizar la degradación. El comportamiento de los tres compuestos fue positivo. Incluso dos coches finalizaron la carrera, a una sola parada, sin usar la goma más dura disponible [Valtteri Bottas y Stoffel Vandoorne, utilizando el ultrablando y el superblando]".