Toyota y BMW habían pensado quedarse en Bahrein durante el fin de semana, después de no haber podido entrenar durante dos jornadas por una gran tormenta de arena. Mientras que Ferrari ni se lo planteó y volverá a casa a preparar los próximos entrenamientos privados.
La meteorología arruinó tres jornadas de entrenamientos en Shakir. En dos, tuvieron que suspender los entrenos y en el último, la pista estaba tan mal que les sirvió de poco. Las tres escuderías que viajaron hasta Bahrein para asegurarse un buen clima, vuelven casi de vacío ya que no podrán quedarse a entrenar ni sábado ni domingo.