Fernando Alonso despejó muchas dudas que habían aparecido sobre el R29 tras el desastre de Portimao y las dos primeras jornadas en Jerez de esta semana.
Tras dos días en el circuito andaluz, tocando las alturas del coche, las caídas, el reparto de pesos, haciendo 220 vueltas, rodando 1.065 Km, y aplicando sus manos, ha bajado el tiempo dos segundos y ha despertado al Renault.
La conclusión del español: "Vamos definitivamente en la buena dirección. Cada vez es más manejable y más fácil de pilotar."