Desde que Fernando Alonso se subió al nuevo Renault en el circuito de Jerez la semana pasada, el optimismo ha inundado al equipo galo y a todos los aficionados del piloto español. Lo cierto es que si los resultados son ahora buenos, mejores podrían ser en el GP de Australia, ya que parece ser que al R29 le faltaban aún 20 caballos de potencia y medio segundo de aerodinámica.
Los tiempazos de Alonso han mostrado a un coche veloz, pero el R29 aún montaba el propulsor del año pasado (ahora capado a 18.000 rpm). Con el nuevo motor evolucionado, el cual tendrá 30 caballos más de potencia, se esperan unas tres décimas por vuelta de mejora. Aunque es posible que para Melbourne utilicen una versión más conservadora, con sólo 20 caballos más.