Tras haber retrasado a las 17.00 (hora local) el comienzo de la carrera, los organizadores del Gran Premio de Australia han decidido cambiar los horarios de las sesiones de entrenamientos libres y la clasificatoria con el fin de contar con una audiencia mayor en Europa, pero también creen que las gradas del circuito de Melbourne se llenarán más, dado que en el pasado tenía lugar por la mañana.
Según ha declarado el director general de la Corporación del Gran Premio de Australia, la carrera de este año será un evento de "entre la hora de comer y la puesta del sol", incluso del tradicional "entre la mañana y la tarde".