La normativa actual para la temporada 2009 dice que se permite a cada piloto un máximo de 8 propulsores para los 17 Grandes Premios del año pudiendo usarlos cada equipo como mejor le parezca, pero, en la próxima reunión de la FIA en Niza, se pretende aprobar que ninguna escudería cambie su motor después de la segunda sesión de entrenamientos libres de los viernes.
Esta modificación se hará tras recibir una sugerencia por parte de los equipos de la parrilla. Con ella se pretende que durante todo el sábado y el domingo no se pueda cambiar de motor, es decir, que con el mismo se deben completar los últimos entrenamientos libres, la calificación y la carrera de un GP.