El vigente Campeón del Mundo dijo que el GP de Malasia fue el peor fin de semana de su vida, pero no porque la carrera fuese un caos y al final sólo se pudiese llevar un punto, sinó por todo el asunto del engaño a la FIA por parte de su equipo, McLaren.
Según publicó el Daily Mirror, el piloto se vio bajo tanta presión que a punto estuvo de anunciar en el circuito de Sepang su retirada de la Fórmula 1. Lewis no veía otra salida a esa situación y tuvieron que ser sus familiares los que le quitasen esa idea de la cabeza.