La Federación, tras oír la voz de algunos equipos que solicitaban una cifra superior a los 33 millones propuestos inicialmente por Max Mosley como limite presupuestario para la próxima temporada, ha decidido que finalmente el limite estará fijado en 60 millones de dólares, unos 45 millones de euros.
Dicho presupuesto, al que se someterán las escuderías que prefieran disfrutar de más libertad técnica a cambio de ajustarse al limite, deberá cubrir todos los gastos de la escudería salvo ciertas excepciones. Los costes de marketing, hospitalidad, sueldos de los pilotos, sanciones, motores, impuestos y gastos exteriores no estarán incluidos.