Tras anunciar ayer el limite presupuestario de 45 millones de euros al que se ajustarán los equipos que lo deseen, la FIA ha confirmado se prohibirán los repostajes y los calendores de neumáticos de cara a la próxima temporada.
Esta prohibición supondrá que los coches volverán a calificar descargados de combustible, eliminando la estrategia de carrera de los factores a tener en cuenta para vencer una carrera y forzando a los equipos a utilizar el mismo neumático durante toda la misma, como ya ocurrió en 2005.