La reunión mantenida hoy en Londres entre el presidente de la FIA Max Mosley, el director ejecutivo de la Fórmula Uno Bernie Ecclestone y la asociación de equipos FOTA no ha arrojado ninguna solución a las discrepancias surgidas entre los principales estamentos de la competición.
El presidente de la FIA se ha mostrado su predisposición a valorar la opinión de los equipos. "Los equipos van a ver si pueden idear algo mejor que el tope presupuestario," declaraba Mosley a los periodistas, que calificó la reunión como 'amigable'. "Estamos dispuestos a escuchar lo que tengan que decir".