La Federación Internacional de Automovilismo (FIA) y la Asociación de Equipos (FOTA) han anunciado un acuerdo que pone fin al conflicto que habia provocado el anuncio de un Mundial paralelo la próxima temporada por parte de los equipos 'rebeldes'.
El presidente de la FIA, Max Mosley, se ha comprometido a no presentarse a la reelección de la presidencia. Tras dicha decisión, los representantes de la asociación de equipos han aceptado que el campeonato 2010 se dispute con las mismas normas que el 2009.