Al actual presidente de la FIA, Max Mosley, no le gusta la paz, eso está claro. Con el acuerdo alcanzado entre FIA y FOTA esta semana, todos pensamos que podríamos centrarnos ya solamente en la competición, pero el británico parece que quiere seguir siendo el protagonista. Y es que tras dos declaraciones bastante polémicas, ahora dice que podría presentarse a la reelección de su cargo en el mes de octubre.
Estas últimas declaraciones podrían acabar de dinamitar el acuerdo de la Federación y los equipos, porque recordamos que una de las principales condiciones para poner fin a la "guerra" fue que Mosley fuese apartado de la presidencia de la FIA en algo más de tres meses.