Si desde que Max Mosley anunció que no se presentaría a la reelección como presidente de la FIA del próximo mes de octubre, la polémica entre el británico y el hombre fuerte de Ferrari Luca di Montezemolo estaba tomando unos tintes peligrosos, las últimas declaraciones de Mosley rayan el surrealismo.
Y es que Mosley ha calificado al italiano de ser un hombre irrelevante en el mundo del motor. "Dentro del mundo de los deportes de motor nadie le toma en serio," decía Mosley, que parece haber decidido marcharse de la FIA haciendo ruido en lugar de dejarlo de forma elegante.