[imgll]https://www.f1aldia.com/photos/400/480/001_small.jpg[/imgll]Ver para creer. La situación esperpéntica que se está viviendo en estos momentos en Hungría es digna de la mejor de las películas de los hilarantes Monty Python. La maniobra que ha bloqueado a Lewis Hamilton en los boxes y que, a la postre, le ha impedido mejorar su tiempo y marcar la pole ha sido culpa del propio Hamilton. Según parece, el piloto británico se saltó hasta seis veces las órdenes de su equipo para que dejara pasar a su compañero Alonso, con más gasolina, y así que consumiese la cantidad suficiente de combustible para mantener la estrategia que tenían previsto. Dado que Hamilton se negó, repito, seis veces a dejarle pasar, a la hora de las paradas, McLaren decidió 'castigarle', bloqueando su pit stop al mantener a Fernando durante más tiempo del necesario para su parada.
De esta manera, y dado que el principal perjudicado es el propio culpable de la situación, a Alonso no le van a sancionar y mañana saldrá desde la primera posición de la parrilla. ¿Qué hay del enfado de Ron Dennis, con lanzamiento de los cascos contra los monitores incluido? La razón: a Ron no le gusta el caos, y la sensación que ha dejado su equipo hoy ha sido esa, por lo que el enfado de Dennis era más con su 'alumno aventajado' Hamilton, que con Fernando Alonso.
Ahora sólo queda una cuestión, casi anecdótica: ¿cómo va a reaccionar la prensa británica ante este giro de acontecimientos?¿Mantendrán la petición de expulsar a Fernando Alonso o castigarán el berrinche de Hamilton?