Michael Schumacher tiene unas ganas locas de volver a la Fórmula 1, y eso es algo que no se le escapa a nadie. Ya sabemos que no podrá volver en el GP de Europa debido a sus problemas de cuello, pero lo cierto es que podríamos verlo a los mandos del F60 en Spa o en Monza. Y precisamente con esta posibilidad está trabajando el heptacampeón.
El miércoles dijo en rueda de prensa que estaba muy decepcionado por no poder regresar a la máxima competición, pero lo cierto es que él sigue entrenándose como si fuese a hacerlo en un futuro próximo. Además, tras la compadecencia, su representante, Willi Weber respondía con un: "¿Por qué no?", ante la pregunta de si Michael podría volver algún día a la F1: "Michael puede trabajar ahora en paz y sin presión sobre su estado físico. Luego ya veremos."