La semana que viene, Max Mosley terminará su mandato y dejará su cargo como presidente de la FIA, ya que no se podrá presentar a las próximas elecciones del organismo regulador. Jean Todt o Ari Vatanen le sucederán al frente de la Federación, pero parece que Mosley no está dispuesto a dejar la Fórmula 1 en paz.
El alemán de 69 años anunciado que publicará sus memorias personales y que en ellas incluirá explosivas revelaciones, algunas relacionadas con el escándalo sexual de ideología nazi que protagonizó en 2008. Max sabe que esto enfadará a mucha gente, así que ya ha avisado a sus abogados de que tendrán mucho trabajo: "Cuando diga la verdad, hay gente que se va a molestar mucho."