Uno de los atractivos que podría tener para los aficionados el primer contacto de los coches con la pista de Interlagos iba a ser la nueva decoración del equipo Renault de cara al Gran Premio de Brasil, ya que esperabamos ver a los coches galos vestidos con sus colores clásicos.
Sin embargo, ayer cuando los mecánicos llevaron los coches de Grosjean y Alonso a las verificaciones técnicas, ya pudimos comprobar como la estética de Renault se ha quedado igual que estaba en la última carrera.