La escudería Toyota (junto con el resto de equipos, la FOM y la FIA) firmó, hace ya algunos meses, el nuevo 'Pacto de la Concordia', un contrato que la obligaba a permanecer en la Fórmula 1 hasta el año 2012. Pero el equipo japonés a cedido ante la crisis económica mundial y ha decidido marcharse inmediatamente de la competición a pesar de todo.
Esto ha provocado un gran enfado en la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) y ha desencademando una (de momento) pequeña tormenta dentro de la F1, con acusaciones cruzadas entre las distintas partes implicadas.