El gestor de los derechos comerciales de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, está muy preocupado por la marcha de constructores (como Honda, BMW y Toyota) de la "máxima categoría" y por eso les ha ofrecido a los equipos de la parrilla actual un aumento del 10% en sus ingresos comerciales por derechos de imagen.
Para su sorpresa, las escuderías han rechazado el aumento porque este las obligaba a permanecer en la F1 hasta el año 2012. El acuerdo no tendría nada que ver con el 'Pacto de la Concordia', firmado ya hace meses, y sería algo paralelo. La idea de Ecclestone era comprometer a los equipos actuales y que estos no pudiesen vender su plaza en la F1, algo que si permite el 'Pacto de la Concordia'.