Hoy ha sido un gran día dentro de Virgin, ya que por primera vez uno de sus pilotos ha terminado una carrera.
Lucas di Grassi ha sido el encargado de llevar el VR01 hasta la bandera a cuadros, ya que su compañero, Timo Glock, tuvo que abandonar debido a un toque con Trulli.
Desde la escudería defienden que son el mejor de los nuevos equipos, y que cuando solucionen los problemas del tanque de combustible podremos ver su verdadero potencial.