Otro mal día para Virgin, la escudería de Richard Branson sigue con problemas de fiabilidad, que le han impedido nuevamente terminar la carrera.
Primero era Di Grassi, al que esta mañana tenían que cambiar su embrague por detectar que no funcionaba correctamente, y después Glock, que no pudo comenzar la carrera al detectar el equipo un problema en su monoplaza cuando este ya estaba situado en la parrilla de salida.
Os traemos las declaraciones del equipo.