La escudería Mercedes afronta el GP de España de la próxima semana como el del cambio, el de la carrera que les servirá para volver a lo más alto de la parrilla y que les colocará en una buena posición para luchar con Red Bull, Ferrari y McLaren. Será uno de los equipos que más modificaciones lleve a Montmeló para su monoplaza, ya que incluso cambiarán la distancia entre ejes.
Sin embargo Michael Schumacher no cree que en la primera carrera de la temporada europea vaya a haber un gran cambio de posiciones en la parte alta de la parrilla. El heptacampeón es cauto y opta por decir simplemente que las mejoras de España serán el primer paso de una gran evolución.