Después de muchos años de trabajo con monoplazas poco competitivos, la Fórmula Uno ha recompensado a Mark Webber con uno de esos momentos que sólo unos pocos privilegiados pueden vivir: ganar el Gran Premio de Mónaco.
"Absolutamente increíble, sin duda hoy es el mejor día de mi vida", dijo Webber en la rueda de prensa a la carrera. "Ganar aquí es muy, muy especial, este circuito es como una prueba de dos horas, y sabía que tenía mucho trabajo que hacer".