El discreto resultado de Ferrari en el Gran Premio de Turquía, de donde el equipo italiano se marchó con una séptima y octava posición, unido al aplastante rendimiento de McLaren y Red Bull en cabeza ha despertado las alarmas en Maranello.
Al terminar la cita turca, el jefe de ingeniería Chris Dyer reconoció que "no es aceptable el nivel de nuestro rendimiento este fin de semana, estábamos muy por debajo de nuestras expectativas".