Que la escudería Red Bull se haya hecho con 8 de 9 'poles' posibles en lo que va de temporada y que en carrera no sean tan competitivos, no podía ser casualidad, tenía que haber algo en su monoplaza que les diese ese extra de velocidad en calificación, y parece que por fin se ha descubierto.
Desde el pasado GP de Bahréin se ha venido especulando con que el RB6 montaba algún tipo de sistema que permitía modificar su altura respecto al asfalto para las sesiones de los sábados, incluso McLaren intentó implementar un sistema así antes de que la FIA le parase los pies. Pero nada más lejos de la realidad, ahora se sabe que la clave de los coches azules está en el sistema de gestión del motor Renault.