"Las órdenes de equipo están mal", estas eran exactamente las palabras de Christian Horner, director del equipo Red Bull, hace aproximadamente un mes, después de que tuviese lugar el choque entre sus dos pilotos en el GP de Turquía.
El británico pensaba que podría controlar la situación interna en la escudería, pero poco a poco se le ha ido yendo de las manos y el capítulo vivido en Silverstone con el asunto del alerón delantero de Webber ha sido el más bochornoso hasta la fecha.
Quizás por esto, Horner haya decidido cambiar de opinión y pensado que si volviesen las órdenes de equipo a la Fórmula 1, las cosas serían más fáciles para él, por lo que ha pedido que se revise esa parte del reglamento: "Es un sistema que, definitivamente, debe volver a discutirse y aclararse."