Después de que Nürburgring acogiera la carrera en la pasada temporada, el Gran Premio de Alemania vuelve a Hockenheim, donde Bridgestone ha preparado una combinación de neumático duro y superblando para la cita.
"Será la primera vez desde 1997 que corremos de nuevo en Hockenheim con slicks. La configuración de la pista en aquel entonces era completamente diferente," explica el sello japonés en su comunicado previo a la carrera.