Parece que este año Mercedes tiene competencia, y es que los hombres de Red Bull han logrado perfeccionar su monoplaza para situarlo, como mínimo, a la altura de un W12 al que aún le quedan algunas cosas por perfeccionar. El director de ingeniería de la escudería de Brackley, Andrew Shovlin, se ha mostrado tajante al afirmar que su rival directo se alzará con la corona si ellos no son capaces de dar un paso adelante en el rendimiento del coche, pues a día de hoy considera que no son todo lo competitivos que deberían. No obstante, tras analizar los datos del Gran Premio de Emilia Romaña, parece que el ritmo por vuelta era bastante similar entre ambos bólidos, especialmente en el paso por curva, por lo que la igualdad está asegurada en próximas citas, si bien los alemanes quieren seguir progresando para poder destacarse en la tabla, pues en estos momentos cuentan con una ventaja muy reducida respecto a los de Milton Keynes tanto en el Mundial de Pilotos como de Constructores.
"No nos vamos de Imola dándonos una palmadita en la espalda y diciendo que puede que hayamos tenido el monoplaza más rápido, sino que nos marchamos teniendo claro que no somos lo suficientemente buenos y que Red Bull ganará el Campeonato si no logramos mejorar nuestro coche muy rápido. Esa es nuestra forma de pensar. Considero que les podíamos haber llegado a presionar durante la carrera. No sé si hubiésemos sido capaces de ganar, ya que desconozco si Max apretó muy fuerte en todo momento, pero lo cierto es que analizando los sectores nosotros estábamos muy cerca de ellos en el paso por curva", expresa en declaraciones publicadas por el portal web ESPN.
¿De perseguido a perseguidor?
Respecto al jefe de la escudería, Toto Wolff, comparte las palabras de su ingeniero y cree que aún están a medio camino, de modo que necesitan dar un salto cualitativo para situarse a la par de Red Bull, a quien de momento le otorga el mejor monoplaza de la parrilla: "Continuamos teniendo algo de déficit con el coche. Conseguimos la Pole, no obstante, si Max hubiese hecho una buena vuelta, hubiera estado tres décimas de segundo por delante. Creo que ese es el orden de la parrilla en estos momentos. En la carrera, todo es más complicado de juzgar, aunque en Mercedes tuvimos un buen coche y lo estamos comenzando a entender. Dicho esto, según los datos, no tenemos un coche capaz de igualar su ritmo", ha añadido el austriaco.