El piloto finés de la parrilla ha confesado el momento que le llevó a pensar en dejarlo todo, pero ahora ha cambiado su forma de ver las cosas. Los momentos difíciles generan cambios en las personas, en sus formas de actuar y también en sus formas de pensar. El año de 2018 de Valtteri Bottas en Mercedes llevó al piloto a pensar que la mejor opción era buscar la salida total y cambiar de aires, consideraba que había llegado al tope y que la crueldad de este mundo se estaba cebando con él.
Sin embargo, el 77 encontró un rumbo alternativo y encontrar un punto de inflexión, se pudo recuperar y ganar la primera carrera de 2019 le ayudó en su camino. Ahora encontró la forma de seguir compitiendo y pensar de forma diferente ante ciertas cuestiones en lo deportivo y también ante los problemas de la vida.
Punto de inflexión y cambio de mentalidad
"Este deporte me ha enseñado muchas cosas, he pasado por muchas cosas. He llegado a una fase en la que casi dejo mi carrera porque estaba harto del mundo de la F1 y pensaba que era cruel conmigo. Ese momento fue el final de 2018. De alguna manera logré recuperarme y ganar la primera carrera de 2019. Ese fue el punto de inflexión para mí".
"Creo que al final entendí que a veces necesitas tiempo, a veces necesitas dar un paso atrás, mirar realmente el panorama general. Y eso es lo que suelo utilizar con frecuencia en la vida. Si hay un pequeño contratiempo en algún lugar, trato de dar un paso atrás y mirar el panorama general: 'Está bien, las cosas en realidad están bastante bien'. Tengo familia, están sanos, todavía conduzco un coche de carreras que es lo que amo, tengo un techo sobre mi cabeza".