El piloto finlandés de Mercedes liderará la parrilla de salida en el Gran Premio de Austria 2018, obteniéndo esa pole con constancia y trabajo a pulso de una ronda de clasificación que estuvo llena de errores y falta de concentración de los demás pilotos. Hamilton y Vettel le acompañan haciendo el 2 y 3. Tristemente, el desempeño de los pilotos de Red Bull no ha estado a la altura del que corre en casa, y es que tanto por inconsistencias como por fallas mecánicas, Max Verstappen ha quedado en la quinta posición, y Ricciardo en la séptima.
Inconsistencias en el circuito
La primera ronda de clasificación vería a Hamilton posicionarse como líder, seguido de Vettel, Bottas y Räikkönen, y Haas no dejó de sorprender con Grosjean alcanzando a Räikkönen por momentos. Red Bull no intentaría marcar tiempos hasta entrada la sesión, mientras que Alonso marcaría tiempos en P9 y P10, aunque rápidamente sería sobre pasado por otros pilotos hasta terminar la sesión apenas dentro de los 15 que seguirían en Q2. Los eliminados en la primera ronda serían Vandoorne, Pérez, Sirotkin, Hartley y Ericsson.
Para la segunda sesión, Charles Leclerc continuó con el ritmo y fue el primero en salir, seguido de los Mercedes rodando super blandas (algo peculiar si se considera que Ferrari conservó las ultra blandas). En Red Bull, Daniel Ricciardo no lograba un buen ritmo, apenas entrando en los primeros diez por momentos, un caso completamente distinto al de su compañero, quien se mantuvo tan confiado con su primer crono, que ni siquiera salió para una segunda vuelta.
A lo largo de la segunda ronda, Alonso estuvo intentando llegar a la Q3, sin embargo, la estrategia de compuestos impuesta por McLaren no ayudaría demasiado, pues continuó con neumáticos blandos. Unas condiciones distintas darían resultados para Renault, Con Hülkenberg entrando a P10, y Sainz posicionándose en octavo bastante temprano. Los eliminados en Q2, fueron Ocón, Gassly, Leclerc, Alonso y Stroll.
Batalla por la pole
La última ronda de clasificación inició con los Red Bull cruzando la línea de salida antes que nadie, Verstappen, dos décimas adelante de su compañero de equipo, algo que ya traería indicadores de lo que su compañero, el australiano Daniel Ricciardo, experimentaría durante los diez minutos que seguirían, ya que por momentos perdió por completo capacidad de subir de primera velocidad estando en pista.
Mientras tanto, en Mercedes, Bottas establecía el mejor tiempo de vuelta que prácticamente nadie logró súperar por el resto de la Q3 de 1:03.130, y Hamilton no lograría alcanzarlo al haberse ido de largo en más de una curva en sus vueltas rápidas, quedándose medio segundo más lento que su compañero. Finalmente, para su última vuelta, Hamilton logró corregir los problemas técnicos que el circuito Spielberg le ha significado a más de uno, sin embargo, no logró una vuelta tan impecable como la del finlandés que le acompaña, y se quedó con la P2.
En su primer intento por alcanzar la pole en Austria, lejos de mejorar el tiempo de los demás, Vettel hizo una vuelta rápida llena de correcciones e idas de largo, a tal grado que sólo pudo llegar a la P6, y ahí se mantuvo, dejando todas las oportunidades para la última vuelta rápida. Su compañero de equipo, sería un caso completamente distinto, llegando a P2 rápidamente, pero no logrando superar al líder. Sin embargo, para su segunda salida en Q3, el finlandés no lograría el mismo éxito y se quedaría en la P4, mientras que su compañero alcanzó la P3.
En la línea media, Sainz mejoraba a su compañero de equipo, Nico Hülkenberg, por una décima, pero aún por debajo de los Haas que hicieron un excelente trabajo este fin de semana, con Grosjean incluso alcanzando el P4 con un tiempo de 1:03.892, una posición que tristemente no podría mantener por mucho pero muestra la capacidad de este equipo.