El adiós de Fernando Alonso a la Fórmula 1 a finales de la temporada pasada significó un varapalo para los aficionados de la máxima categoría del automovilismo, sobre todo para los españoles, que tenían en el bicampeón del mundo una de las grandes figuras del país. Su marcha dejó todo el protagonismo a Carlos Sainz, que además de heredar la condición de principal piloto español, heredó el equipo con el que el asturiano completó su último giro. El número '55' de McLaren asegura que se sube al coche con el objetivo de conducir para él mismo, por lo que no pilota para demostrarle su valía a los demás. Del mismo modo, asegura comprender la salida de su compatriota de la F1, pues, como bien afirma, la razón de su adiós es la misma que sufren a día de hoy gran parte de los pilotos de la categoría, que es encontrarse encasillados en la zona media y no optar a los primeros puestos.
"No me subo al coche para demostrarle algo a los demás, sino que solo pienso en hacerlo bien por mí. Ser el único piloto español es una responsabilidad positiva. Por supuesto que la Fórmula 1 debería tener a los mejores pilotos del mundo, y Fernando es uno de los mejores, si no el mejor de todos; por lo tanto, está claro que falta en la parrilla, pero la razón de su despedida es la misma que sufrimos muchos otros, incluido yo", ha expresado en unas declaraciones para el diario italiano La Gazzetta dello Sport.
Pide menor diferencia de rendimiento
El español lamenta no tener el reconocimiento del deporte por el mero hecho de no formar parte de uno de los tres grandes equipos de la parrilla (Mercedes, Ferrari y Red Bull), así que pide cambios en la normativa que ayuden a la zona media a ganar competitividad y acercarse a la parte alta de la tabla: "Merezco el reconocimiento, igual que muchos otros pilotos como Ricciardo, Pérez o Hülkenberg. Todos deberíamos tener la oportunidad de luchar por al menos el podio en cada carrera. En cambio, a día de hoy esta oportunidad está reservada para los que pilotan en uno de los tres mejores equipos. El coche marca demasiado la diferencia. Eso demuestra que la Fórmula 1 todavía tiene mucho que hacer para aumentar la competencia y el entretenimiento", ha proseguido.
Por otra parte, el español confía en McLaren, una escudería campeona que en un futuro próximo debería recuperar el dominio que perdió hace años: "Este es el equipo en el que ha corrido Senna, y aquí todavía hay mecánicos e ingenieros que trabajaron con él y diseñaron sus coches ganadores. Ahora tratamos de volver a la cima, y creo que tenemos el espíritu correcto para hacerlo", ha manifestado para finalizar.