El resultado de la carrera tuvo un sabor agridulce para la escudería de Milton Keynes. La parte positiva fue la fantástica victoria de Max Verstappen, pero ese error en un sensor en el monoplaza de Sergio Pérez le arrebató la posibilidad de subir al podio. Un primer y cuarto puesto sigue siendo positivo de cara a la lucha por ambos campeonatos y la distancia con Leclerc y Ferrari disminuye con el paso de los Grandes Premios.
De cara a las carreras posteriores, Horner reconoce que llegarán mejoras en verano para el RB18, especialmente para reducir el peso del coche, por lo que seguirá siendo un rival a tener muy en cuenta de ahora en adelante.
Christian Horner:
"Fue una carrera realmente táctica, tiramos con todo lo que teníamos. Tuvimos suerte de que Ferrari no parara bajo el coche de seguridad, Max estuvo bajo mucha presión de Charles Leclerc, pero se mantuvo concentrado, no cometió ningún error y controló la victoria a partir de ahí. Checo tuvo mala suerte, tuvimos un fallo en un sensor muy pronto, sin ese fallo podía haber terminado segundo. Tenemos algunas carreras interesantes por delante, el coche está rodando bien y tenemos mejoras que llegarán en verano. Estamos satisfechos por cómo nos marchamos de este fin de semana".