Tras la imposibilidad de celebrar el Gran Premio de Emilia Romaña el pasado fin de semana por las delicadas condiciones climáticas, la siguiente prueba no nos hacía esperar mucho. El Principado de Mónaco se vestía de gala para su ansiada, esperada y glamurosa cita con la F1 de cada año. La cuestión es que la cita monegasca se convertía en la primera de las pruebas en territorio europeo de esta temporada. La jornada de viernes se establecía con el plan habitual de fin de semana de la Fórmula 1, ronda de entrenamientos libres 1 para iniciar el GP y sesión de entrenamientos libres 2 para cerrar la jornada de viernes. Así fueron las rondas que abrían el fin de semana de competición en las incomparables calles de Mónaco.