ESPECTÁCULO E INCERTIDUMBRE

El briefing de F1 al Día: Gran Premio de España 2022

El equipo de 'F1 al Día' opina acerca de lo ocurrido en el Gran Premio de España 2022.

Cristian Rodríguez García 24 de Mayo 2022 19:45

La sexta prueba de la temporada nos ha brindado nuevos líderes en ambos Campeonatos, las confirmaciones de algunos pilotos y el paso atrás de otros. El abandono de Charles Leclerc en Montmeló dejó en bandeja un nuevo doblete a Red Bull, así como la cuarta victoria de la temporada de Max Verstappen. El neerlandés se pone así al frente del Mundial por primera vez en lo que va de año, contando por triunfos cada uno de los Grandes Premios que ha finalizado. Por otro lado, George Russell no para de sorprender tras vencer una vez más a Lewis Hamilton. Una sensación de la que se aleja cada vez más Carlos Sainz, que después de cometer dos nuevos errores de gran calado, sigue generando dudas en un 2022 que dista mucho de lo que habíamos visto de él en ediciones anteriores. Como punto positivo para los españoles, Fernando Alonso consumó su mejor carrera del año y sumó dos puntos tras arrancar desde la última posición.

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Por desgracia, cuando el Gran Premio de España se acerca en el calendario sabemos que no va a ser una carrera muy emocionante, al menos no suele serlo. Esto se debe en gran parte a que quitando la frenada de la recta principal adelantar se vuelve una tarea prácticamente imposible. Se hicieron modificaciones en el trazado el año pasado, pero no solventaron nada en lo que a emoción se refiere. Aunque en esta ocasión la historia fue diferente, alguna excepción tenía que tener la regla, por lo general la pole es siempre sinónimo de victoria. Pero esta vez tuvimos hasta cuatro líderes. Pero la verdad sea dicha, la carrera era de Charles Leclerc de no haber aparecido esos problemas de fiabilidad en su Ferrari. Luego vimos el liderato de George Russell, es cierto que el británico menor de Mercedes tuvo una actuación impecable y aunque su monoplaza ha mejorado notablemente, aún no están para pelear por victorias.

Y después pudimos asistir a la implacable verdad de Red Bull, sexta carrera del año nada más, pero los austriacos tienen muy claro el orden de sus pilotos y no vacilan a la hora de ordenarlos en pista, aunque eso signifique dar una orden clara por la radio. Es cierto que Max Verstappen venía rápido, pero Sergio Pérez estaba haciendo un trabajo espectacular. Hizo con George lo que Max no pudo al no tener DRS en buenas condiciones. Pero cuando cabalgaba en la primera plaza desde el muro le insinuaron si camuflajes que debía hacerse a un lado y dejar la primera posición en manos de su compañero.

Sin duda una injusticia para el piloto mexicano, Red Bull está en un momento pletórico, Ferrari estaba fuera de juego, pero aun así tenían muy claro que su favorito debía finalizar por delante. Y eso que tanto los austriacos como el neerlandés se iban a poner al frente de ambas generales en el campeonato. Sabemos bien cómo funciona este circo, pero no es agradable ver cómo se deciden cosas fuera de la pista, más aún cuando el campeonato está recién comenzado como aquel que dice. El GP de España acabó con la victoria real de Max Verstappen, que para nada hay que desmerecer su actuación, victoria moral para Sergio Pérez y victoria emocional para George Russell tras batallar con los Red Bull, liderar la prueba y sumar un nuevo podio.

Pero España no cerró el telón de su cita sin mostrar las facetas negativas, Magnussen se vino arriba en la salida y trató de hacerle un exterior a Hamilton, una maniobra que acabó en toque y con ambos pasando por el pit. Viendo cómo pudo resurgir después el 44 bien pudiera haber tenido mayor protagonismo en la zona delantera en carrera. Aunque su final de carrera no estuvo libre de complicaciones. Parecen estar de vuelta, pero nada va a ser como antes. Otra carta se volteó de manera negativa para Carlos Sainz, la mala fortuna le sorprendió en casa y ante su gente. Pudo recuperarse de alguna forma, pero no era la carrera esperada en esta ocasión para el madrileño.

Sin duda, este domingo no fue el día de Ferrari, y por el bien del campeonato, esperemos que lo visto esta carrera sea cosa de un mal día. Porque estábamos viendo una batalla muy emocionante entre Red Bull y Ferrari, entre Charles Leclerc y Max Verstappen. Sería un triunfo para el espectador si los de Mercedes se unen a estas batallas hasta el final.

Otro que se llevó un fin de semana torcido fue Fernando Alonso, los de Alpine se deshicieron en promesas, pero lo cierto es que no están llegando resultados ni para afianzarse en la zona media. Salía último y trabajó sobre el asfalto de forma incansable para ver cómo su equipo lo tiraba todo por tierra con una mala parada. Así no se puede hacer mucho, veremos cómo avanza todo entre ambas partes. Pero no arroja muchas luces de esperanza.

La cita en tierras españolas tampoco fue muy satisfactoria para los de Faenza, la realidad es que la zona media no está nada estable. Los equipos aparecen en algunas citas para luego acabar desdibujándose en otras. Eso también pasa de sábado a domingo con algunos equipos, como es el caso de Haas, brillantes en clasificación, pero los puntos se reparten los domingos. No podemos cerrar el fin de semana sin hablar de Alfa Romeo, Valtteri Bottas rondó el podio con una buena actuación personal, pero la mala estrategia de su equipo le borró cualquier opción posible al dejarle sin gomas para el final y no es la primera vez que le pasa. Toca poner rumbo a Mónaco en estas condiciones, tierras de glamour, pero de poca emoción también en lo que a la acción en pista se refiere para el aficionado. Veremos cómo llegan de destrezas a una de las pistas más complejas del año.

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Por primera vez en muchos años, puedo decir que he terminado de ver un Gran Premio de España sin bostezar durante una hora y media seguida. Por fin han pasado cosas emocionantes en Montmeló. Bien es cierto que algunas de ellas las ha propiciado la mala suerte, como es el caso de Charles Leclerc, pero no estamos para ponernos exquisitos sabiendo de dónde venimos. De hecho, esta cita me ha parecido sumamente más interesante que la de Miami, rodeada de mucha parafernalia pero que resultó ser un auténtico tostón. Aunque no procede hablar ahora de esa carrera. Vamos con Barcelona, territorio ya histórico en la categoría reina del automovilismo y que, como comentaba, esta vez sí estuvo a la altura. El apoyo de la afición española fue apoteósico, sin embargo, no resultó suficiente para llevar a Carlos Sainz en volandas hacia su primera victoria de la temporada.

El 2022 del madrileño está siendo un "quiero y no puedo". Los grandes campeones se forjan en los momentos de mayor presión, y él no está respondiendo, ni mucho menos, a la altura. Qué mala salida hizo en la carrera y qué error más inoportuno en la Curva 4. Siempre he sido un ferviente defensor del español, pero no hay por dónde coger su rendimiento en esta campaña. Está claramente por debajo del nivel de su compañero de garaje y la excusa de la adaptación ya no cuela. Espero equivocarme y que sea capaz de resurgir, pero tengo la sensación de que esta temporada se le va a hacer muy cuesta arriba. Como consuelo, el abandono de Leclerc le permitió acabar por delante de él por primera vez este año, aunque conociendo los motivos no hay grandes cosas que celebrar.

El que sí dio una alegría a los suyos fue Fernando Alonso. Sideral la remontada del bicampeón del mundo en un circuito en el que adelantar es una tarea arduo complicada. Pocos esperábamos que llegara a los puntos partiendo desde la última posición, pero lo hizo. El español respondió cuando más lo necesitaba y parte hacia Mónaco lleno de confianza. Qué alegría verle llevando a cabo actuaciones tan majestosas. Esta vez Alpine rindió medianamente bien en carrera, algo que parecía poco probable viendo la alta degradación del Circuit de Barcelona-Catalunya y los problemas de degradación que vienen arrastrando desde las última citas. Por una vez, no han hecho el ridículo. No, esperad, sí lo hicieron, con nueva parada lamentable en boxes con Alonso. Vaya, qué mala suerte, siempre les pasa con él. A ver si practican, porque es lamentable el rendimiento de los galos en los pits.

Pero volvamos a la cabeza. Lástima por el abandono de Leclerc. Brillante su último intento en Qualy, salvando su trompo anterior, y gran carrera hasta el momento en el que abandonó. Está en la lucha y sin duda es una de las grandes estrellas de la temporada. No obstante, ojo con los ceros, porque pueden pasar factura. Y es que Max Verstappen está al acecho, como demostró. Ni un error ni los fallos en el DRS le impidieron llevarse el triunfo. Está claro que sabe aprovechar las oportunidades. 4 victorias en las 4 carreras que ha acabado. Aunque, eso sí, esta vez contó con la inestimable ayuda de un descontento Sergio Pérez, aunque siendo sinceros, el ritmo del neerlandés era muy superior, por lo que hubiera pasado al '11' con o sin órdenes de equipo.

También merece una mención especial el equipo Mercedes. Menudo paso adelante de los alemanes y qué magnífica labor de George Russell, que sigue regalándonos grandes actuaciones y continúa batiendo a Lewis Hamilton, que en esta ocasión sí pudo dar lo mejor de sí, aunque se merece un tirón de orejas por querer abandonar al principio de la carrera tras verse último. Ningún piloto puede tirar la toalla, y menos un siete veces campeón del mundo. Vergonzoso el comportamiento del británico. También hay que saber perder y competir en el pozo. En esos momentos es cuando se ve a los campeones de verdad. Veremos cómo transcurre todo, porque parece que la escudería alemana ya está aquí. Me pregunto cómo gestionarán la situación si empiezan a pelear por las victorias y Russell sigue mojándole la oreja al número '44'. ¿Habría también órdenes de equipo?

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