Altos y bajos en el equipo Alpine en la primera parte de la temporada, ya no solo por el rendimiento del monoplaza, sino de sus propios pilotos. Fernando Alonso desembarcaba en la escudería gala con la presunta figura de piloto número uno, sin embargo, fue Esteban Ocon el encargado de tirar del carro en las primeras citas ante la falta de adaptación del asturiano, que poco a poco fue encontrando su sitio para comenzar a superar de manera asidua a su compañero de garaje. No obstante, el Gran Premio de Hungría, que acabó con el inesperado triunfo de Ocon, dejó al número '31' por delante de Alonso en la General. Un tira y afloja que no ha afectado dentro del equipo, pues como afirma el propio piloto francés, no ve que haya preferencia por parte de Alpine hacia el doble campeón del mundo. Se siente en igualdad de condiciones y ambos trabajan para que la escudería siga creciendo en la categoría reina del automovilismo, donde actualmente ocupa la quinta plaza del Mundial de Constructores en su particular lucha con los hombres de Alpha Tauri y Aston Martin.
Remando en la misma dirección
"Lo cierto es que no siento que se prefiera un lado del garaje al otro. El equipo confía en mí, incluso en tiempos difíciles, y les estoy muy agradecido por ello. No veo ninguna diferencia desde el inicio de la temporada. Los ingenieros me escuchan. No es que el feedback de Fernando y el mío sea completamente opuesto o que uno quiera algo completamente diferente del coche que el otro, no obstante, si fuera el caso, el equipo construiría dos partes. Esta es la filosofía. Fernando no estaba contento con la dirección asistida al principio, y fue entonces cuando probó diferentes versiones. Tiene mucha experiencia, así que sería estúpido por mi parte ignorar eso. Probé algunas cosas que él había cambiado; algunas me ayudaron y otras no", ha expresado en una entrevista concedida a Auto Motor und Sport.