El tricampeón del mundo de Fórmula 1, Niki Lauda, ha fallecido este lunes a los 70 años de edad, según ha confirmado su propia familia. El expiloto austriaco, que tuvo que someterse a un trasplante de pulmón el pasado mes de agosto (era el tercero de su vida, pues en 1997 y en 2005 ya había recibido otros dos trasplantes), llevaba alejado de los circuitos desde entonces. A lo largo de estos últimos días, el médico le recetó una medicación que afectó a sus riñones, lo cual provocó su ingreso en una clínica privada para efectuarle un tratamiento de diálisis debido a problemas renales: "Con gran tristeza, anunciamos que nuestro querido Niki ha fallecido junto a su familia este lunes. Sus logros únicos como deportista y empresario serán y permanecerán siempre inolvidables. Su entusiasmo incansable, su sencillez y su valentía son hoy un modelo para todos nosotros. Lejos de las cámaras era un esposo, padre y abuelo cariñoso. Le echaremos de menos", expresa su familia en un comunicado, según ha publicado el diario británico Daily Mail.
Un piloto único
Niki Lauda fue, es y será parte de la historia de este deporte. Durante sus años en activo, se hizo con el Campeonato del Mundo hasta en tres ocasiones (Ferrari, 1975 y 1977; McLaren, 1984), así como con un subcampeonato (Ferrari, 1976). Todo ello se traduce en 25 victorias, 54 podios, 24 pole position y 24 vueltas rápidas en un total de 171 Grandes Premios. El austriaco se retiró de la competición en el año 1985, uno después de su último título, dejando una gran huella que nunca será olvidada. Entre sus equipos, además de los antes mencionados, Ferrari y McLaren, estuvieron también March, BRM y Brabham. Actualmente, era presidente no ejecutivo de Mercedes y mano derecha de Toto Wolff. Una gloriosa etapa tanto dentro como fuera de los circuitos que, desgraciadamente, llegó a su fin ayer.