Hace dos semanas se hacía oficial una de las noticias más esperadas por muchos fans de la categoría reina del automovilismo: el anuncio del regreso a la competición de Fernando Alonso, que en su nueva etapa luchará bajo las órdenes de Renault, el equipo con el que logró los dos Campeonatos del Mundo que ostenta a día de hoy. Una vuelta muy deseada, pero que no será fácil. Los hombres de Enstone se encuentran lejos de la zona alta de la tabla, y en estas tres primeras pruebas de la campaña están un paso por detrás de rivales directos como Racing Point o McLaren. Algo que no parece preocupar al asturiano, quien afirma tajante que lo dará todo sea cual sea la posición por la que pelee. Así lo ha expresado en una de las ponencias de la PL4NETS Wellbeing Summit. Del mismo modo, pone todas sus expectativas en 2022, cuando la llegada del nuevo reglamento podría implicar un significativo cambio en el rendimiento de las escuderías y, presumiblemente, el fin de la hegemonía de Mercedes.
"La próxima temporada los monoplazas van a ser los mismos que estamos viendo ahora, por lo que soy consciente de dónde puede estar Renault y, por ende, que no vamos a luchar en la parte alta de la tabla, sin embargo, es apasionante trabajar con el objetivo de mejorar para 2022 un equipo y un ambiente fuerte. Sea como fuere, cuando cierre la visera, me dará igual si peleo por ser décimo, séptimo o cuarto, ya que lo afrontaré como si se tratara de la última curva del Mundial, así que voy a intentar darlo todo", ha publicado el diario español Marca.
Metas por alcanzar
Antes de regresar a la categoría que tantos éxitos le dio hace casi una década y media, el asturiano tiene pendientes las 500 Millas de Indianápolis, donde volverá a buscar la ansiada Triple Corona. No le será fácil viajar al territorio estadounidense con todas las restricciones establecidas por la actual pandemia, aunque el bicampeón solo piensa en saltar a la pista y resarcirse de lo ocurrido el año pasado, cuando ni siquiera pudo participar en la prueba: "Estoy viendo las carreras de Fórmula 1 mientras espero la cita de Indianápolis, que es mi reto este año, aunque está difícil por la situación en la que se encuentra Estados Unidos con los contagios y las dificultades para viajar, puesto que tenemos prohibida la entrada; no hay vuelos, necesitamos permisos... no obstante, tengo ganas de llegar y competir allí. Luego, en septiembre, habrá que pensar en la F1, y el año que viene, en una vuelta quizás inesperada, aunque ahora mismo siento también que con la pandemia el futuro de otras disciplinas ha quedado un poco en el aire, pero la F1 es una categoría con fuerza, de modo que estoy con ganas de afrontar otra aventura y de que salga bien", ha concluido.