Nunca es sencillo pilotar un monoplaza de Fórmula 1 cuando apenas cuentas con experiencia en la categoría, y menos aún si tu compañero de equipo es todo un campeón del mundo. Es lo que le ocurre a Antonio Giovinazzi. El italiano debutó en la competición en el año 2017 (Gran Premio de Australia) como sustituto de Pascal Wehrlein, y lo hizo logrando un meritorio duodécimo puesto. Sin embargo, la mala suerte se cebó con él una carrera después, en China, donde sufrió un fuerte accidente que le impidió volver a ser piloto oficial hasta este mismo año. Ahora, el de Martina Franca se encuentra en un complicado periodo de adaptación en el que aún no ha conseguido hacerse por completo al C38, lo cual se ha traducido en un casillero personal que sigue en blanco después de tres carreras, mientras que su compañero de garaje, Kimi Räikkönen, ya ha sumado doce puntos y a día de hoy es el mejor clasificado de la zona media de la parrilla.
Giovinazzi relata lo difícil que está siendo para él este inicio de campaña después de tanta inactividad a los mandos de un monoplaza, aunque al mismo tiempo agradece tener a su lado al piloto finlandés, pues asegura que supone un gran punto de apoyo en su aprendizaje. Asimismo, alaba al de Espoo, a quien considera un competidor fantástico que se ayuda de su experiencia para dar ese punto extra de rendimiento que les falta a muchos en la parrilla actualmente.
Difícil proceso de aclimatación
"No está siendo fácil para mí este inicio de temporada después de dos años sin correr, sobre todo en lo que respecta a la Clasificación, ya que acabas perdiendo un poco de ese empuje extra. Creo que tener a Kimi como compañero de equipo es una buena referencia. Cuando me detengo en el garaje, puedo ver sus datos y observar dónde puedo mejorar. Necesito seguir trabajando así, pues creo que todas las cosas se unirán y habrá muchas más razones para tener un buen resultado. Sé cómo trabaja; es un piloto fantástico con mucha experiencia que ya sabe lo que quiere antes de que llegue el fin de semana de carreras. Esto es algo realmente bueno de ver. Al fin y al cabo, solo se trata de experiencia", ha comentado en una declaraciones recogidas por el medio Crash.net.
Por otro lado, el número '99' de Alfa Romeo Racing se ratifica en que la experiencia es un grado muy importante en la Fórmula 1, ya que genera esa confianza que le falta a los neófitos, como le ocurre a él, que por ahora se muestra inseguro pilotando su coche: "En todos los deportes te encuentras con la misma situación. Cuando ves a los mejores y más experimentados atletas, te sientes menos preparado que ellos. Pero creo que eso es algo normal", ha añadido para finalizar.