2022 está siendo un año realmente bueno para Red Bull. La escudería austriaca tiene en su mano ambos Campeonatos tras una racha alentadora en las últimas citas. Y es que Max Verstappen se ha subido al escalón más alto del podio en los últimos cinco Grandes Premios, lo que le lleva a acumular ya once victorias en lo que va de campaña. El piloto neerlandés parece imparable a los mandos de un RB18 que funciona como la seda. Además, los triunfos más recientes han llegado gracias a grandes remontadas, por lo que la superioridad es aún mayor de lo que indica la tabla de tiempos. A pesar de ello, el máximo responsable del equipo de las bebidas energéticas, Christian Horner, no se atreve a afirmar que vayan a ganar las citas restantes del calendario, si bien reconoce que el coche se adapta a la perfección a todos los trazados, independientemente de las características de estos.
Por encima de todos
"Es mucho pedir ganar todas las carreras que quedan, ya que hay una variedad de circuitos enorme. Singapur en comparación con Monza tiene más curvas que ningún otro del calendario. Es bacheado, es un circuito urbano, por lo que es un reto muy diferente. Estamos en una gran posición en el Campeonato, si bien vamos a atacar en cada carrera y a hacerlo lo mejor que podamos, y los puntos vendrán por sí solos. Hemos sido rápidos en Spa, Zandvoort, Monza e incluso en Budapest, así que en una variedad de circuitos, el coche rinde realmente bien", ha señalado en palabras concedidas al portal web estadounidense Motorsport.