Todo el mundo está impresionado con Red Bull. Hasta sus propios rivales parecen haber tirado la toalla, y eso que solo llevamos un Gran Premio. La gran mayoría coincide en la excepcionalidad del RB19 y en que los de Milton Keynes son inalcanzables ahora mismo, y podrían seguir siéndolo durante toda la temporada. Este pesimismo ha inundado a los adversarios, pero desde la escudería austriaca son más conservadores. Si bien reconocen que su arranque ha sido prácticamente perfecto, no descartan que haya pelea en la parte alta de la tabla. Y es que una única prueba no puede determinar el devenir de la temporada, por lo que hay que esperar a ver cómo rinden los coches en circuitos con diferentes características, pues de momento solo hemos podido verles en acción en Baréin.
No hay tanta distancia
"Solo tenemos un data set, por lo que no vamos a dar nada por garantizado. Veremos cómo va Yeda en dos semanas y en Melbourne después. Creo que una vez que tengamos dos o tres circuitos, habrá una imagen mucho más clara de las debilidades y fortalezas de nuestro coche y de nuestros rivales. Pero desde luego, ha sido un gran inicio para nosotros y una carrera muy bien ejecutada para traer a casa esos puntos. 23 carreras es una maratón y se trata de ser consistentes y estables a lo largo de la temporada. Baréin fue un gran inicio para ambos pilotos. Checo perdió terreno en la salida, en el lado sucio de la pista, y además vio cómo Charles se benefició de tener unos neumáticos nuevos. Aun así, la estrategia que tuvimos con Checo nos permitió pasarle y luego fue una pura cuestión de gestionar la carrera hasta el final. Esperamos que nuestros rivales nos planteen una gran batalla en las próximas carreras", ha expresado en palabras publicadas por Pitpass.