El inicio de Alfa Romeo en estas primeras carreras no ha sido el óptimo, ya que el monoplaza no es competitivo y aunque los pilotos den el máximo no sirve para superar la primera eliminatoria de la clasificación ni estar cerca de la zona de puntos en condiciones normales. A pesar de la situación actual, Kimi Räikkönen no tira la toalla y sigue empujando para encontrar la manera de que recuperen el nivel que habían mostrado a lo largo de 2019. Hacer pruebas es la prioridad ahora mismo porque así se puede descubrir qué les ayuda y qué les perjudica, por lo que esta es la tarea fundamental para escapar de las últimas posiciones. El finlandés afirma que consiguen extraer el máximo potencial del C39 en un fin de semana y esquivan las dificultades, es posible que regresen a la zona de puntos y seguir puntuando. En términos generales, el veterano no cree que las actuaciones del equipo hayan sido tan malas como parece desde fuera, por eso sigue confiando en que puedan mejorar. Todavía hay muchas carreras por delante que aprovechar y revertir esta difícil situación.
No está todo perdido
"Obviamente, sabemos que la velocidad no es la que debería ser. Si podemos maximizar la velocidad del coche y no tener problemas en la primera vuelta o tener penalizaciones por errores propios, pienso que podríamos estar en la pelea por el Top 10. Necesitamos extraerlo todo para volver a estar ahí. No creo que lo hayamos hecho, hay áreas en las que podemos mejorar para sacar todo el potencial del monoplaza. Tenemos que probar cosas e intentar aprender de ello. Al tener dos fines de semana en el mismo circuito, algo único de este año, puedes probar más y así tener una mejor base respecto a la semana anterior. Está claro que siempre probamos de todo y vemos si mejoramos o vamos a peor. En las prácticas haces diferentes pruebas para averiguar en qué área has avanzado y en cuáles no. No creo que lo hayamos hecho demasiado mal en las carreras anteriores", finalizó el piloto finlandés en palabras recogidas en la página oficial de la Fórmula 1.