Leclerc ha salvado el honor de Ferrari en Austria con una victoria de regusto amargo para los italianos tras el abandono de Sainz por un problema de motor cuando estaba a punto de asegurarse el segundo puesto y, por ende, el doblete. Max Verstappen (+VR) y Lewis Hamilton han completado el podio.
El encendido de semáforos daba paso a la segunda salida del fin de semana en Spielberg. Al contrario de lo que ocurriera en el Sprint, se producía una mayor calma en el arranque en lo más alto de la parrilla con Verstappen controlando posición sobre Leclerc, mientras que Sainz peleaba con Rusell, saliéndose por fuera de la trazada y pasando acto seguido al de Mercedes. Pero lo más intenso aún no había llegado. Pérez aprovechaba esta batalla para meter el morro del monoplaza y atacar al número '63'. Momento en el que Russell realizaba una maniobra algo peligrosa y tocaba al de Red Bull, mandándole a la grava y comprometiendo su carrera. Tanto es así que el mexicano acabaría retirando el monoplaza unas vueltas después. A partir de entonces, entrábamos en una preciosa pelea al gato y al ratón entre Leclerc, Verstappen y Sainz. 12 vueltas aguantaba el neerlandés con las gomas medias, sufriendo un desgaste muy alto. Unos giros después lo hacían los hombres de Ferrari, que salían detrás del '33', pero con gomas más nuevas y mejor ritmo. Esto hacía que el monegasco pasara sin problemas a su rival directo en la vuelta 33. Ya en la 37, Max entraba por segunda vez a boxes y le dejaba la segunda plaza a Sainz.
Empezaba a cocinarse un doblete de los hombres del "Cavallino Rampante", mientras el ingeniero de Red Bull le decía a su pupilo que su pelea iba a ser con Lewis Hamilton, estratosférico remontando desde la octava plaza y rodando con holgura en la cuarta ante la imposicibilidad de Esteban Ocon de seguirle. Entretanto, seguían causando estragos los límites de pista, con sanciones de 5 segundos a Pierre Gasly y Lando Norris y numerosos avisos de bandera negra a algunos pilotos, como el propio Hamilton o Sainz. Más atrás, Fernando Alonso rodaba con solidez, sin prisa pero sin pausa, manteniendo un buen ritmo y ganando algunas posiciones. Todo avanzaba hacia un 1-2 de Ferrari, sin embargo, la situación iba a cambiar sustancialmente. Leclerc entraba al pie lane en la vuelta 49 y Carlos lo hacía una vuelta después. De nuevo con gomas más jóvenes, el monegasco lanzaba el coche al líder del Mundial en la vuelta 53 y le superaba sin problemas, saliendo con mucho más agarre en la curva 3. Por detrás, Sainz acumulaba varias vueltas rápidas consecutivas y se acercaba sin paliativos al de Hasselt, a quien iba a alcanzar en el giro 57. Por desgracia para él, justo cuando le cogía el DRS para adelantarle, su motor decía basta y al español no le quedaba otra que retirar el coche, ya en llamas, y salir del mismo como podía ante la lentitud de los comisarios, cuya actuación ponía en el límite la integridad del madrileño. Doloroso abandono del número '55' que le deja prácticamente fuera de la lucha por el título, y que además llegaba en el peor momento, pues estaba mostrando un gran ritmo con los neumáticos duros.
UN K.O inmerecido en una de sus mejores carreras del año
La rotura de motor en el F1-75 de Sainz ocasionaba un Virtual Safety Car que algunos aprovechaban, o al menos lo intentaban, como ocurría con Fernando Alonso, que entraba en boxes, regresaba a pista en 9ª posición tras arrancar desde el fondo de la parrilla y veía cómo la tuerca de la rueda delantera no estaba bien apretada, lo que le obligaba a detenerse de nuevo y a volver fuera del Top 10, teniendo que remontar otra vez más para rascar un punto que sabe a poco después de un fin de semana en el que no le ha podido ir peor. Todo llegaba a su fin con Leclerc logrando el triunfo, no sin sufrimiento, pues el pedal del acelerador le iba a dar algún quebradero de cabeza en las últimas vueltas. Tras él, Verstappen cruzaba contento en segunda posición. Junto a ellos, un Lewis Hamilton que encadena tres podios consecutivos y cada vez se siente más cómodo a los mandos del W12. Buen trabajo también de Russell, 4º, y Ocon, 5º. Aunque si hay que destacar la labor de alguien es la de Mick Schumacher. Colosal el de Haas con una más que merecida sexta posición, la mejor de su vida en la Fórmula 1, y cada vez con mejores sensaciones. De hecho, ha sido nombrado piloto del día. Destacable jornada del equipo de Kannapolis con Magnussen también en los puntos.